Hoy sentía que tenía ganas de vivir la vida.

Llegué cansada a casa,me quité los zapatos y me puse las zapatillas para andar por casa.
Subí las escaleras y entre en mi habitación.
Sentada en la cama,empecé a ver como el sol se escondía fulminando su último rayo de sol en aquel día y como en ese momento la luna se hacia responsable de la noche.
Vale,lo intento ocultar,veras pequeña,estoy muy triste pero demasiado triste.
Y si a ti pequeña perrita te lo vengo a contar,por que te prefiero a ti,ya que tu por lo menos eres fiel y me sabes escuchar.
Otra vez no,no.
Esa estúpida que me sentía siempre que me hacia quedar mal,esa compañera que llevo soportando hace años y que parece que no va a cambiar su actitud.
No,ni tan siquiera lo intenta.
Bajé la persiana,abrí la ventana por que era una de esas noches calurosas,me senté en el suelo y comencé a abrazar a mi pequeña escuchadora.


Por un momento me dejé llevar por el sueño y cerré los ojos.
Me adentré en un mundo en el que no existían las preocupaciones,donde la gente no te criticaba por lo que veían,sino que te admiraban por lo que eras.
Y yo estaba allí,sentada en la estación del tren,esperando a que llegara el siguiente.
Sonreía al ver que muchas de las que pasaban por mi lado me decían ``Buenos días´´,``Que pase un buen día,hasta pronto´´.
Ah,lo que daría por que en la realidad fuera así.
Noté que unos brazos me acostaron en la cama y me hacían cosquillas.
Sonreí,sonreí soñando.
Me quité la colcha y solo me arropé con las sábanas que desprendían un olor a lavanda agradable de oler y sentir con el tacto.
Seguí soñando hasta que alguien me estropeo el día.
Lunes,como odio los lunes.
Cuando ya te toca volver a clases,cuando la vida es mas agobiante.


Me preparé para ir al instituto,me coloqué la mochila a la espalda y comencé a caminar.
Umm,como adoraba ese olor que desprendía la hierba de la humedad de la noche.
Corrí al ver que en dos minutos iban a cerrar la puerta.
Y lo conseguí,llegué a tiempo.
Me pasé la mano por la frente,menos mal que has echo un esfuerzo Madison,ya te valía.


Pasé al aula,me senté en el pupitre y comencé a escuchar al profesor.
-El jueves que viene nos vamos de excursión a la piscina,así que entregadle estos papeles a vuestros padres y si asistís me traeís el papel firmado antes del miércoles.
Bien una fiesta a la piscina,con las ganas que tenía de darme un chapuzón.


-Ringggggg,ringggggg.
Después de dos horas insufibles de Química,salimos a descansar.
-Olivia,¿has oido lo de la excursión?,¿tu vas a ir?
-Sí Madi,a ver si convenzo a mis padres.
-Yo si no pasa nada iré.
-Madi,¿estas bien?
-Emm,si eso creo,bueno te dejo que ha sonado la campana adiós Oli.


No quería contarle la verdad,tal vez me tomaría por idiota,por ponerme así por esa situación,pero no soportaba más a esa,no,a ella no.


En clases nos estaban explicando en que consistía el h2o,que la componía y sus estados.
Venga vamos-pensé,esto es un chantaje,tres horas de Química y aun no se ha cansado,por dios.
Después de otras dos temibles horas de Historia,tocó la hora de irnos a casa.


Llegué y olí el apetitoso manjar de mi madre.
Umm,salsa de albondígas-dije en voz alta.
Mi madre me puso un plato un tanto llenito,pero ella sabía que me tenía como loca esa salsa que mi madre cocinaba todos los lunes desde que era bien pequeñita.
-Mamá,hoy te ha salido más bueno,¿que le has echado?
-Cielo cariño y amor,esas son las especias mágicas que las madres obtenemos.
-Pues que sepas que está muy bueno y quizás,incluso me coma el plato entero-dije con la boca llena.


Parecía que hoy era su día y que estaba de buen humor.


Cuando acabamos de comer,abrí la cremallera de mi cartera,saque el informativo,le enseñé el papel de la excursión a mi madre y le puse cara de cachorrito por si acaso dudaba de dejarme ir.
-Umm,¿que caro no?
-Mamá,por favor,si solo son 10 euros-dije riéndome.
-Ya lo suponía,ya sabía yo que 100 no podían ser-dijo riéndose.


Me firmo,en aquel momento pegué un brinco de la silla y le sonreí.
Gracias mamá,gracias.


Subí a mi cuarto,decidí dejarle un correo a Olivia diciendole que a mi si me dejaba ir,y que si a ella también y que sentía lo de antes,que no se preocupara que no era nada.


No me contestaba,que raro y eso que ella solía responder en un abrir y cerrar de ojos,¿le habrá pasado algo?
Ojalá y me equivoque pequeña.

1 comentario:

  1. Ojalá que a Oli no le haya sucedido nada :3
    Me encanta cielo,genial como siempre (:
    Sigue así,un besote.

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